En tiempos de desconexión espacio-temporal, de fragmentación de los relatos y de una sobrevaloración del presente, rescatar los legados de las personas mayores de forma trascendente permite trabajar de forma novedosa la prevención y atención de la fragilidad emocional de las personas mayores y reconectar (las) –en una lógica intergeneracional- con las generaciones más jóvenes. Pero, además, permite construir una cartografía de microhistorias personales que, entrelazadas, constituyen un relato colectivo único, útil para el presente y valiosísimo para el futuro (investigaciones sociales, transferencia patrimonial, recuperación de prácticas, etc…). La UNESCO, principal valedora del Patrimonio Cultural Inmaterial, recuerda que “su importancia no estriba en la manifestación cultural en sí, sino en el acervo de conocimientos y técnicas que se transmiten de generación en generación”. A eso le apuesta el proyecto LEGADO-Cantabria (link a la web www.legadocantabria.org), a la transmisión generacional de experiencias, prácticas, conocimientos y reflexiones vitales.
La apuesta es no sólo proporcionar el contexto de estímulo cultural necesario en la etapa madura de la vida a sus beneficiarios/as, o acompañar el proceso de envejecimiento activo gracias, sino romper el aislamiento o la soledad que muchas de las personas adultas mayores experimentan en una sociedad cada vez con menos vínculos interpersonales al tiempo que estimulamos el intercambio intergeneracional de conocimiento, prácticas y experiencias. Fundación PEM acumula una vasta experiencia de más de cuatro décadas de trabajo con personas adultas mayores desde un enfoque no terapéutico pero con efectos terapéuticos. Además, ya ha realizado experiencias de utilización de la autobiografía como estrategia pedagógica-geropsicológica de trabajo con estas personas.
El proyecto LEGADO-Cantabria es un paso completo y complejo en una ruta que ya transita Fundación PEM y que pretende construir un modelo piloto de trabajo interdisciplinar que combine la psicología evolutiva –desde el enfoque del ciclo vital-, la comunicación, la recuperación y puesta en valor del patrimonio inmaterial y la pedagogía crítica.